IBIZA A CUATRO PATAS
Una feliz idea que alguien tuvo. Unas excursiones por Ibiza en compañía de estos amigos. A ellos también les gusta andar. Y además en todo momento se portaron muy civilizadamente. Disfrutamos todos de un día de sol y de un paseo por los bosques y costas de Ibiza.
Si deseas visitar esta asociación puedes hacerlo en esta web:
La naturaleza en invierno está en su cénit. Verde los bosques, azul el mar. Entre ellos los algarrobos (como el de la imagen) y los pinos nos acompañaron en todo momento.
La excursión transcurrió por el norte de Ibiza, concretamente el lugar elegido fué el Puerto de Sant Miquel, y desde allí nos dirijimos a la torre des Molar. Una torre que tuve la suerte de visitar por primera vez, y ver las fantásticas vistas que desde allí se disfrutan.
Un país se puede juzgar por la forma en que trata a sus animales. Una frase sabia de Mahatma Gandhi que por desgracia si la aplicamos a España no nos quedaríamos en muy buen lugar habida cuenta de las sangrientas corridas de toros hechas espectáculo y encima con personas que claman que esa es la fiesta nacional por excelencia... Pero no acaba ahí la cosa, sino que se siguen tirando cabras desde campanarios o arrancando cuellos a patos en algunos puntos de la geografía nacional entre otras lindezas. Hace poco sin embargo Cataluña prohibió las corridas de toros, lo cual parecía una llegada al siglo XXI aunque es evidente que se hizo por otros motivos lejanos a evitar el sufrimiento animal, ya que otras tradiciones crueles como los toros embolados y similares no fueron prohibidas, por tanto, una actitud bastante hipócrita.
En Ibiza afortunadamente hace mucho tiempo que la plaza de toros fue derribada.
Con todo este panorama nacional de maltrato animal da gusto que a alguien se le ocurra este tipo de iniciativa para disfrutar juntos perros y personas...
Ambos, tal vez en este caso más las personas que los animales disfrutamos de las magníficas vistas sobre el Mediterráneo que nos proporcionaba la Torre des Molar... Más adelante en otra entrada ampliaré las imágenes desde ese lugar y de la Torre.
Cala Truja fué un punto de reunión de las mascotas y los acompañantes, un día estupendo para disfrutar de la arena y algunos canes se adentraron en la fría agua del mar.
Igual que los escolares cuando están de excursión, los perros estuvieron atentos a los juegos, y a su disfrute propio incluyendo los mas valientes con baños en el mar, donde iba la pelota que les lanzaban algunos...
A la hora de regresar lo hicimos por un camino al lado del mar, donde la exhuberante naturaleza isleña mezclaba los colores verdes de los pinos con el azul del Mediterráneo.
A la hora de regresar lo hicimos por un camino al lado del mar, donde la exhuberante naturaleza isleña mezclaba los colores verdes de los pinos con el azul del Mediterráneo.