CAPILLA PALEOCRISTIANA DE SANTA AGNÉS
Situada a una altitud de 59 metros sobre el nivel del mar, es un lugar donde la historia y la leyenda se entremezclan. Algunos historiadores señalan el caracter catacumbario de la misma.
Una galería amplia se entremezcla con otras mas estrechas.
Parece ser que los primeros Cristianos en la época Romana, cuando el culto Cristiano era perseguido, era aquí donde se reunian a practicar el culto entonces perseguido.
Durante el siglo XIX, el Archiduque Luís Salvador de Austria ya hablaba en sus cronicas de Baleares de este lugar. Hacía alusión a una amplísima galería con un gran manantial de aguas cristalinas y en donde cada 24 de agosto las gentes de la isla se reunían.
Parece ser que un derrumbe acabó con la galería y el manantial, que por cierto otras fuentes históricas también citan.

No se sabe con exactitud cuando, pero también se habla de que una talla de madera de la Virgen que lleva el nombre de la cueva, que desde aquí se trasladó a la iglesia siempre volvía a aparecer en la cueva.
No se sabe con exactitud cuando, pero también se habla de que una talla de madera de la Virgen que lleva el nombre de la cueva, que desde aquí se trasladó a la iglesia siempre volvía a aparecer en la cueva.
De aquí tal vez venga la tradición del famoso cuadro (según unas versiones) o famosa talla de madera (según otras) de la venerada Santa Inés, que a bordo de un barco a la deriva, los tripulantes prometieron entregar en el puerto donde llegasen sanos y salvos y ese fué precisamente el Puerto de Sant Antoni de Portmany un 24 de agosto y que fué ese precisamente el motivo de la actual festividad de San Bartolomé.
